¡Casarse…deporte de riesgo! Estamos en primavera y empieza la temporada por excelencia.
Organizar una boda se convierte en el primer reto en pareja. Coincidir en todas las decisiones que tendremos que tomar no resulta nada fácil. Sin duda casarse puede ser muy estresante.
Nos enfrentamos a un desafío nuevo y desconocido, un momento único y emocionante. Podemos compararlo con la práctica de un deporte extremo, excitante, maravilloso y arriesgado.
Nos queda una ardua tarea por delante y debemos ponernos manos a la obra cuanto antes si queremos un resultado perfecto sin morir en el intento.
Siempre ayuda tener una actitud positiva y enfocar el tema como “un motivo para disfrutar”. No hagas un drama de cualquier contratiempo y no te preocupes demasiado por ligeros desajustes. Es tu momento y tú decides como quieres que suceda. Si lloras que sea de emoción, no de rabia o impotencia.
Con cariño todo sale perfecto y los pequeños fallos se solucionan con buena voluntad y un poco de paciencia.
Intenta programar y planificar todos los temas, fecha, trámites legales, invitados, celebración, alianzas, flores, menú, tarjetas, viaje de novios, vestido, maquillaje, complementos, fotógrafo, transporte y alojamiento de invitados, regalos…
Todos deben disfrutar de este día tan especial pero no hay que olvidar que los verdaderos protagonistas sois vosotros, los novios. La última palabra es vuestra y las intromisiones e imposiciones de última hora no resultan aconsejables.
Contar con un presupuesto aproximado del evento evitará sorpresas desagradables.
Personalizar cada detalle hará que tu boda sea diferente al resto. Busca un hueco para ocuparte de pequeños detalles. Crea un ambiente de complicidad entre todos tus invitados y prepara alguna sorpresa divertida. Se trata de crear un ambiente relajado y festivo, imagina que sales de juerga con tus amigos pero a lo grande. No te olvides de los niños, si están entretenidos y cómodos se unirán a la fiesta sin protestar.
Si quieres evitar regalos “poco acertados” puedes recurrir a una lista de bodas. Facilitas la tarea a tus invitados que a veces carecen de tiempo y sobre todo de idea. Es imposible que todo el mundo conozca tus gustos y necesidades. Podrás terminar de equipar tu casa y acceder a ciertos caprichos que has dejado para más adelante. Todo son ventajas y el acierto está asegurado…un problema menos.
Por favor no permitas que nada ni nadie arruine tu momento de gloria.
¡RELÁJATE Y DISFRUTA! ¡FELICIDADES!